Introducción:
El aeropuerto Barajas de Madrid, «Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid–Barajas» a partir del 26 de marzo del 2014, abrió sus puertas en 1933, y desde entonces ha sido ampliado en numerosas ocasiones. La última y más significativa fue en 1997, cuando la empresa Aena convocó un concurso para una nueva ampliación. La propuesta del arquitecto británico Richard Rogers en colaboración con el madrileño Estudio Lamela, resultó ganadora.
Concepto:
El proceso de diseño se ha centrado en ofrecer una experiencia mejorada a los pasajeros, con la creación de un ambiente atractivo y tranquilo.
La obra está basada en tres ideas: las cubiertas onduladas, las columnas en pares, y una gama de colores del arco iris que va del azul oscuro al rojo, pasando por el amarillo. Mediante el uso de colores en las columnas que sostienen el techo ondulado, se identifican las diferentes zonas de la Terminal.
Concepto del paisaje:
Habitualmente los edificios terminales de los grandes aeropuertos se encuentran rodeados de elementos secundarios, tales como estacionamientos de vehículos, central eléctrica, hoteles, etc. que en absoluto contribuyen a la comprensión clara del mismo.
La terminal de Barajas integra dichas estructuras previas de modo tal que no perturben en ningún momento la percepción y lectura del conjunto, y a su vez integre el paisaje, consiguiendo así una imagen distinta que expresa su carácter local y homogéneo.
Edificio principal
Estructura:
Materiales
Techo
Interiormente la llamativa estructura metálica ondulada del techo está revestida con tiras de bambú que le otorgan una apariencia suave y sencilla. Contrastando, los “árboles” estructurales de tubo de acero se pintan con colores diferentes, en una gama de tonos graduados. En el centro del edificio la estructura expuesta de acero se pintó de amarillo, en la zona sur rojo, azul en el lado norte, creando una galería de 1.2 kilómetros de largo. Estos colores añaden calidez y brillo a la construcción, pero también sirven para orientar a los pasajeros. Los llamativos lucernarios que horadan el techo disponen de brise-solei interior en color blanco. Por la parte exterior el techo, se terminó en aluminio.Suelos:
Las losas de las diferentes plantas fueron cubiertas con grandes placas de mármol en diferentes tonos que combinan con suelos de vidrio arenado y reforzado en ciertas zonas de descanso, o con placas de vidrio reforzado y esmerilado. En la planta superior, a lo largo de toda la galería, los tubos de respiración han sido revestidos con carcazas de acero inoxidable, en la zona de cintas las ventilaciones cogen una forma futurista, lacada en blanco con 6 salidas remarcadas en acero pavonado.
El marco estructural es de hormigón armado y acero, revestido con grandes cristaleras que permiten una clara visión de las pistas y los aviones. En las plantas inferiores las vigas de acero, los contrafuertes y demás sistemas estructurales han quedado a la vista, formando parte de la decoración, al igual que el hormigón visto.
Las zonas de cintas de equipaje, más oscuras y encerradas que las superiores están iluminadas por numerosos puntos de luz rodeados de grandes pantallas metálicas de color blanco que cuelgan del techo de vigas.
Medio ambiente:
Las fachadas están protegidos por una combinación de aleros profundos generados por la continuación del techo que buscan el sombreado externo. Un sistema de ventilación de bajo consumo es utilizado en el muelle, en otros lugares se recurre a sistemas de alta velocidad más convencionales. El uso de la luz natural es también un componente clave en la reducción del consumo de energía.
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